sábado, 18 de diciembre de 2010

TETRAGRAMMATON



TETRAGRAMMATON
Observó cómo los buitres revoloteaban sobre su cabeza. El sol parpadeaba como un gran ojo incandescente. La arena formaba una gran amalgama, desfragmentándose luego en partes como miles de partículas. Simulando la complejidad de un átomo. Había imaginado los tormentos del infierno. Su madre yacía sobre sus brazos exánimes, mostrando la vulnerabilidad y las desventajas de poseer un cuerpo. Entonces soñó con la misma situación repitiéndose siempre de día. Los mismos buitres, el mismo sol con forma de globo ocular, la misma arena. Pensó en la imposibilidad de pronunciar el nombre sacro. Entonces anocheció.

3 comentarios:

  1. Me recuerda un mito griego...tal vez de eso se trate el infierno, de aquello que se repite, incesante...sólo la noche trae un poco de alivio...
    Tatiana.

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  2. sólo las palabras nos crean universos, la mente también, en el alba existen muchos secretos

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